Los problemas con la estructura física del corazón pueden exigir al corazón mayor esfuerzo. Algunos ejemplos de problemas físicos son:  Problemas con las cavidades o las válvulas del corazón. Anomalías de los vasos sanguíneos. Anemia, o un recuento bajo de glóbulos rojos. Problemas asociados con la distrofia muscular o con el síndrome de Down.