Cuando usted está enfermo, su respiración es menos profunda de lo normal porque respirar se vuelve doloroso e incómodo. Respirar superficialmente puede causar infecciones tales como la neumonía. Usar su espirómetro de incentivo le ayudará a respirar más profundamente y le proporcionará una manera de medir el volumen de sus respiraciones. Una higiene oral adecuada también puede ayudarle a prevenir una neumonía.