Lávese sus manos. Remueva el apósito de su catéter. Revise el sitio alrededor del catéter. Póngase en contacto con su profesional de la salud si usted nota:  Secreciones o mal olor en el sitio de inserción del catéter. Fiebre. Enrojecimiento. Hinchazón o acumulación de fluido.