Cuando se desarrolla un neumotórax o un derrame pleural, el aire o el lí­quido se tienen que extraer porque dejarlos puede ser fatal para el paciente. Para saber la cantidad de aire o de lí­quido que hay alrededor de los pulmones, los médicos hacen uso de radiografí­as, tomografí­as axiales computarizadas o ultrasonidos del pecho.