Aunque los profesionales de la salud realicen recuentos de sangre con frecuencia, los pacientes deben estar atentos a los síntomas de estos efectos secundarios. Para ayudar en el tratamiento y la prevención de complicaciones que pueden poner en riesgo la vida, si se presenta alguno de los síntomas siguientes, los pacientes deberán ponerse en contacto con su profesional de la salud.