El tratamiento para el linfoma no Hodgkin puede incluir radioterapia, quimioterapia, terapia biológica y trasplante de células madre. A veces se administran todos los tratamientos. Las decisiones sobre el tratamiento se toman dependiendo de la etapa de la enfermedad, la ubicación en el cuerpo, los síntomas presentes, el estado de salud general y la edad del paciente.