Los anticuerpos monoclonales son el tipo de terapia biológica que se usa para el linfoma. Son proteínas elaboradas en el laboratorio que pueden unirse a las células cancerosas. Ayudan a que el sistema inmunológico mate las células del linfoma. Las personas reciben este tratamiento a través de una vena en un centro de salud, en una clínica o en el hospital. La radioinmunoterapia usa anticuerpos monoclonales radioactivos para enviar radiación directamente a las células cancerosas.