Las células grasas se encuentran debajo de la piel por todo el cuerpo. Sin embargo, muchas de ellas se concentran más en el abdomen, caderas, muslos, pantorrillas, brazos, glúteos, espalda y cuello. La grasa también se almacena dentro del abdomen alrededor del estómago y los intestinos. Las diferencias en el sexo y la genética también ayudan a decidir donde se almacena la grasa.