La diálisis es un tratamiento que salva las vidas de los pacientes con enfermedad renal. Sin embargo, diálisis puede hacer solo entre el 10 y el 15% del trabajo de un riñón que funciona normalmente. Los riñones sanos filtran la sangre 24 horas al día, lo que la diálisis no puede hacer. Un paciente con un riñón funcionando tiene entre el 50 y el 85% de función renal normal.