Escoja el área para inyectarse.  Los mejores lugares para inyectarse en el cuerpo son donde hay tejidos grasos entre la piel y el músculo, tales como:  Muslos. Parte exterior alta de los brazos. Abdomen, excepto en el ombligo o la cintura.  Si usted es delgado, inyéctese solamente en los muslos o en la parte superior alta del brazo.