Estos medicamentos, algunos de los cuales están disponibles sin receta médica, pueden ayudar a aliviar los dolores musculares de la fibromialgia. Es posible que también alivien los cólicos menstruales y los dolores de cabeza que frecuentemente son asociados con la fibromialgia. No obstante, deben usarse bajo la supervisión de su médico, especialmente porque estudios recientes han encontrado una relación entre el uso prolongado de antiinflamatorios no esteroides sin aspirina y el riesgo elevado de ataques de apoplejía e infartos de miocardio.