Quite las alfombras gruesas del dormitorio y otros cuartos de la casa. No se recomienda el alfombrado que está puesto sobre pisos de concreto, tales como en los sótanos, porque éste atrapa la humedad y promueve el crecimiento de ácaros y moho. En casas de pacientes que sufren de alergias, es preferible tener pisos de madera y linóleo.